Este curso, Jesucristo y Su Evangelio Sempiterno, da a los alumnos la oportunidad de estudiar el ministerio eterno de Jesucristo, concentrándose en Sus funciones divinas a lo largo de Su vida preterrenal, terrenal y posterrenal. Los libros canónicos, las palabras de los profetas modernos y el documento llamado “El Cristo Viviente: El Testimonio de los Apóstoles” (Liahona, abril de 2000, págs. 2–3) son las fuentes inspiradas de este curso. El élder Richard G. Scott, del Quórum de los Doce Apóstoles, ha enfatizado la importancia de estudiar la vida y la misión de Jesucristo:
“Con gran energía, te animo a establecer un plan de estudio personal para entender y apreciar mejor las incomparables, eternas e infinitas consecuencias del cumplimiento perfecto del llamamiento divinamente designado de Jesucristo como nuestro Salvador y Redentor. La meditación personal profunda de las Escrituras, acompañada de la oración inquisitiva y sincera, fortificará tu entendimiento y tu agradecimiento por Su expiación invalorable” (“¡Él vive, y yo lo honraré!”, Liahona, mayo de 2010, pág. 77).
A medida que los alumnos lleguen a comprender y apreciar la importancia del llamamiento divino del Salvador y el impacto que Él tiene en su vida, serán fortalecidos contra los desafíos de la vida y se sentirán más preparados para analizar las funciones divinas del Salvador en el Plan de Salvación, del cual su vida personal es parte integral.
¿Qué se espera de los alumnos?
Los alumnos deben leer los pasajes de las Escrituras y los discursos proféticos que aparecen en la sección “Material de lectura para el alumno” de cada lección. Los alumnos también deben cumplir con los requisitos de asistencia y demostrar que son competentes en el material del curso.
0 comentarios